Cada día es más frecuente encontrarse con plagios de marcas, tanto entre pequeños diseñadores que son plagiados por grandes marcas, como entre conocidas marcas.
Y frente a situaciones como esta, que ya afectan a nivel mundial, lo que siempre recomendamos es protegerse. Es decir, registrar tu marca ante la organización que proteja la propiedad industrial en tu país. En el caso de España en la Oficina Española de Patentes y Marcas (OEPM).
¿Qué es un plagio de marca?
El plagio de marca, conocido también como misbranding, es la práctica de explotar la reputación de otras marcas a partir de la suplantación de sus productos. Este plagio suele realizarse a partir de productos de menor calidad que los originales.
Cualquier uso de elementos identificativos de la marca, como podrían ser símbolos, nombres, logotipos o cualquier término que esté protegido, será penalizado.
Por ello es tan importante que la titularidad de la marca sea exclusiva, para que cualquier vulneración, robo o suplantación pueda ser denunciado.
Según las cifras de la Oficina de Propiedad Intelectual de la Unión Europea, aproximadamente un 7% de la población europea compró intencionalmente productos falsificados en el último año.
Además, se calcula que el plagio de marcas llega a costar unos 60.000 millones de euros de pérdidas al año a las empresas europeas.
¿Cómo evitar que plagien tu marca?
Aunque no todas las empresas son conscientes de la importancia de registrar su marca, es la única opción segura para proteger una empresa y evitar que plagien una marca.
Registrar una marca otorga a la empresa el derecho exclusivo para utilizarla en el mercado e impedir que terceros puedan comercializar productos similares o idénticos con esa misma marca o alguna que se le parezca y que pueda crear confusión.
El hecho de que plagien una marca no solo disminuirá las ganancias de la empresa y confundirá a sus clientes, sino que también dañará la reputación e imagen de la empresa. Sobre todo cuando los productos rivales sean de una calidad inferior.
Además, si el competidor que plagia esa marca registrase la marca en cuestión u otra similar en la OEPM, podría reclamar que la empresa que venía utilizando esa marca sin registro deje de hacerlo, ya que no tiene la titularidad para ello. Aquí nos encontraríamos en una situación muy injusta, pero que ya ha sucedido anteriormente.
Por lo tanto, la única forma de evitar que plagien tu marca o tus diseños será registrándolos. Es crucial para que una marca tenga éxito en el mercado, pero también para asegurarse del derecho prioritario y exclusivo a utilizarla.
Denuncias por plagio de marca y derechos de autor
Actualmente son muchas las denuncias que ha habido por plagio de marca y derechos de autor. Esta problemática sucede a nivel mundial, y agrava el desarrollo de pequeñas marcas o diseñadores que se frustran al ver su trabajo replicado y con materiales más económicos y de baja calidad. Pero sobre todo que confunden al consumidor, que acaba comprando este producto creyendo que es el original.
Hoy te explicaremos algunos de los casos más sonados por plagio de marcas:
Tolentino Haute Hats contra Tommy Hilfiger
La firma sevillana de sombreros y tocados Tolentino Haute Hats interpuso una demanda a Tommy Hilfiger por supuesto plagio de su logotipo. Por eso, pidió que se retirasen los productos que llevasen ese logotipo en España, para evitar confusiones.
No hablamos del conocido logotipo de Tommy Hilfiger, sino de una versión que hizo a partir de las letras T y H, y que daban una imagen muy similar al logotipo de la firma española.
A continuación, os adjuntamos un montaje que el propio Tolentino compartió en sus redes sociales:
Louboutin contra Zara e Yves Saint Laurent
Louboutin, una de las firmas de calzado más admiradas en el mundo, denunció a Zara e Yves Saint Laurent porque consideraba que habían plagiado sus zapatos YoYo en Francia, conocidos por la suela roja.
En un primer juicio Louboutin ganó a Zara, pero esta presentó recursos y acabó ganando finalmente, ya que el juez consideró que los términos de la patente del color eran demasiado vagos.
En el caso de Yves Saint Laurent fue diferente, ya que acabó ganando y se llevó 700.000 euros.
Gucci contra Forever 21
Gucci consideró que Forever 21 había plagiado una colección suya, utilizando unas barras de color azul-rojo-azul y verde-rojo-verde que tenían sus prendas y que en 1988 ya había registrado. Avisó por escrito a Forever 21 para que retiraran esos productos de la venta. Al ver que no lo hicieron, la firma italiana Gucci puso dos demandas por dilución de la marca, competencia desleal y omitir los avisos anteriores.
Este caso, tras una batalla de demandas y contrademandas, acabó resolviéndose con un acuerdo entre las partes y presentando un desistimiento conjunto de forma voluntaria, para que el caso no volviese a activarse.
Chanel contra Amazon
En este caso, Chanel puso una demanda a Amazon por vender productos falsificados de su marca. Acabó ganando el caso y fue indemnizada con 3 millones de euros.
Esto ocurre con muchos ecommerces y marketplaces donde se están vendiendo productos falsificados a precio del producto original.
Una de las marcas más denunciadas: Shein
La gran multinacional Shein, valorada en más de 100.000 millones de dólares, tiene ya 50 demandas por infracción de derechos de autor o plagio de marca.
Los demandantes son desde pequeñas marcas y diseñadores, como grandes corporaciones como Ralph Lauren, Oakley, Stussy, Levi’s Strauss, AirWair Internacional, Zara, etc.
Todas estas marcas denuncian el plagio de sus productos, ya que se han llegado a fabricar prendas que tenían hasta su logotipo. Por el contrario, Shein declara que “no es su intención infringir la propiedad intelectual de nadie y no es su modelo de negocio”.
Car-Freshner Corporation contra Balenciaga
La marca Car-Freshner Corporation, conocida por sus ambientadores en forma de árbol, interpuso una demanda a Balenciaga por fabricar unos llaveros muy similares a sus ambientadores.
Finalmente, las dos marcas llegaron a un acuerdo.
Carbonell contra La Española
Como último caso te hablamos de dos conocidas marcas de aceite de oliva que se enfrentaron después de que Carbonell pusiera una demanda a La Española, al intentar registrar su marca y la conocida etiqueta de sus productos con la mujer andaluza.
Carbonell declaraba que esa etiqueta era muy similar a la suya y creaba confusión al consumidor. Y el Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TUE) le acabó dando la razón.
Si no quieres encontrarte con este problema en tu empresa, contacta con nosotros y te ayudaremos a registrar tu marca y proteger toda la propiedad intelectual e industrial que necesites para evitar robos, plagios y suplantaciones.
El equipo de PymeLegal.